En estos días nosotros los llamados evangélicos,
protestantes o cristianos hemos adaptado unas palabras en nuestras predicas y
enseñanzas como por ejemplo: “decretando
y confesando.” Decretando que tu eres sano, confiesa que tu eres
prosperado, exitoso, etc. ¿Ahora, tiene sustento bíblico el uso de estas
palabras?
Primero vamos a definir estas dos palabras confesar y decretar:
1.
Decretar: 1. tr. Dicho de la persona que
tiene autoridad o facultades para ello: Resolver, decidir. 2. tr. Dictar un decreto.
2. Confesar: 1. tr.
Dicho de una persona: Expresar voluntariamente sus actos, ideas o sentimientos
verdaderos. U. t. c. prnl.
2. tr. Dicho de una persona:
Reconocer y declarar, obligada por la fuerza de la razón o por otro motivo, lo
que sin ello no reconocería ni declararía. 3. tr. Dicho
de un penitente: Declarar al confesor en el sacramento de la penitencia los
pecados que ha cometido. U. t. cprnl.
(Según el DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA - Vigésima segunda edición)
Después de conocer estas palabras a la
luz del diccionario, veamos ahora que nos dice la Biblia.
Levítico 26. 3-4: Si anduviereis en mis
decretos y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra,
26:4 yo daré vuestra lluvia en su tiempo, y la tierra rendirá sus productos, y
el árbol del campo dará su fruto.
Aquí en estos pasajes Jehová Dios había decretado que si
andamos en los decretos de El y los ponemos por obra entonces El mandara la
lluvia a su tiempo. Pero note que es el decreto de Dios; Dios es el que está
dando el decreto. Seguimos leyendo.
Deuteronomio 4. 1-6: Ahora, pues, oh Israel, oye los estatutos y decretos que yo os enseño, para
que los ejecutéis, y viváis, y entréis y poseáis la tierra que Jehová el Dios
de vuestros padres os da.
4:2 No añadiréis a la palabra que yo os mando, ni disminuiréis de ella, para
que guardéis los mandamientos de Jehová vuestro Dios que yo os ordene.
4:3 Vuestros ojos vieron lo que hizo Jehová con motivo de Baal- peor; que a
todo hombre que fue en pos de Baal-peor destruyó Jehová tu Dios de en medio de
ti.
4:4 Mas vosotros que seguisteis a Jehová vuestro Dios, todos estáis vivos
hoy.
4:5 Mirad, yo os he enseñado estatutos y decretos, como Jehová mi Dios me
mandó, para que hagáis así en medio de la tierra en la cual entráis para tomar
posesión de ella.
4:6 Guardadlos, pues, y ponedlos por obra; porque esta es vuestra sabiduría y
vuestra inteligencia ante los ojos de los pueblos, los cuales oirán todos estos
estatutos, y dirán: Ciertamente pueblo sabio y entendido, nación grande es
esta.
Moisés habló al pueblo diciendo: “Mirad, yo os he enseñado estatutos y decretos, como
Jehová mi Dios me mandó,”
Moisés aquí no dijo que “yo decreto, yo confieso o yo declaro,” sino que dijo los decretos que Jehová había mandado. Creo que hasta ahora no hemos visto ningún pasaje que nos de a nosotros fuerza para nosotros decretar cualquier milagro o cosas sobre una persona.
Ahora, que
nos dice proverbios 28. 13 con
respecto a confesar: El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que
los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.
Aquí está hablando de confesar
o declarar, dar a conocer nuestros pecados para ser perdonados, porque con la
boca se confiesa para perdón de los pecados y con el corazón se cree para justicia.
¿Más que nos dice 1 Juan 1. 9? Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para
perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.
Dios nos
llama a que confesemos nuestros pecados, declaremos a El nuestras maldad. El no
nos ha mandado a que decretemos o confesemos bendición o prosperidad sobre
nuestros hermanos amigos o vecino. Oh amigo,
quiero que entienda que estas dos palabras de la que estamos enseñando
hoy, que la están usando en las Iglesias y que le están dando un uso
inapropiado, las usan en la metafísica
y la filosofía dándole un uso de actitud mental positiva; que tu decreta que está
sano aunque estés enfermo, que tu eres prosperado aunque no tenga nada, que tu
eres exitoso, etc. Estas palabras arrugan la verdad de lo real. Nosotros no
somos dioses ni reyes que gobiernan naciones para decretar una ley o una orden
bajo tu propia voluntad.
¿Que nos
dice Mateo 3. 5-6? Y salía a él Jerusalén, y toda
Judea, y toda la provincia de alrededor del Jordán, 3:6 y eran bautizados por
él en el Jordán, confesando sus pecados.
Uuuh aaajaaah! ¿Qué nos dice Cristo de confesar? A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, yo también le confesaré delante de mi Padre que está en los cielos. 10:33 Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los cielos.
Conclusión
Romanos 10. 8-11: Mas ¿qué dice?
Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de
fe que predicamos: 10:9 que si confesares con tu boca que Jesús es el
Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás
salvo. 10:10 Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la
boca se confiesa para salvación. 10:11 Pues la Escritura dice: Todo aquel
que en él creyere, no será avergonzado.
Así que, no nos pongamos a decretar como si nosotros fuéramos
dioses, mas bien hagamos como hizo Jesús cuando dijo: “Que sea tu voluntad y no
la mía.”
Y si queremos que alguien sea sanado la nos manda a poner las manos sobres los enfermos y ellos sanaran. Y si algo confesamos, confesemos nuestros pecados a Dios y El es fiel para perdonarnos. Amigo, que este mensaje te haya sido de un buen provecho. Bendito sea Dios y nuestro amado Jesucrito El que nos dió su Espíritu Santo.
Por: Ruber Pérez
Escrito por: Richy P.
Los Discípulos de Jesucristo
Obtenga esto totalmente gratis y más en fontaversal.net
3/12/2010
0 Comentarios